Ricos en educación!

En Polonia son ricos; no en dinero, sino en educaciónA pesar de que la población infantil enfrenta niveles de pobreza significativos, los estudiantes polacos están entre los mejores del mundo. 
Indica Andreas Schleicher, el jefe de análisis para los exámenes internacionales PISA, que solo un 10% del desempeño de los alumnos tiene que ver en algo con dinero. 
El éxito no va en el número de alumnos por salón, ni en la participación de los padres en actividades del colegio, ni en los recursos tecnológicos –al igual que en Finlandia y en Corea, en Polonia no hay dispositivos electrónicos en el salón de clase–. 


La conclusión clave de la investigación mundial realizada por Amanda Ripley para su libro “Los niños más listos de la Tierra” (The Smartest Kids on Earth) es que la variable realmente definitiva para los buenos resultados es la calidad de los profesoresPolonia ejemplifica también las virtudes de la descentralización. Aunque la financiación y la administración de su educación pública son controladas a nivel estatal, los directores locales tienen libertad para contratar profesores y escoger el currículum.

Hay exámenes nacionales para los diferentes grados que les permiten a las autoridades locales hacer un seguimiento estrecho de cómo van los colegios. 
En el modelo educativo polaco la exigencia y el fracaso son fuerzas activas. Que un alumno reciba la máxima calificación es una rareza, y es algo que los jóvenes asumen con naturalidad.






















Además, las artes, la música, la poesía y la literatura están siempre presentes en la formación y el disfrutar de los jóvenes.
 
  
En nuestros países debemos decidir cómo vamos a preparar y seleccionar con rigor a los maestros, para luego darles autonomía y exigirles resultados, como lo hacemos con profesionales en otros campos. 

Tomado de una intranet privada. No se tiene la fuente.